En la televisión, algunos anuncios capitaneados por simpáticas y dicharacheras actrices algo más que maduras dan por supuesto que debemos asumirlo y que necesitamos la ayuda de pequeños salvaslips especiales antiolores e hiperdiscretos para sentirnos cómodas y felices. Nos piden resignación ante la incontinencia urinaria con una esplendorosa sonrisa porque "ya se sabe, es algo normal".
Al menos alguien habla de ello ante el silencio generalizado sobre este problema, aunque sea para ofrecernos un parche con el que llevar una "vida normal" o al menos discreta con nuestro problema.
¡Pero no! Lo que no nos cuentan es que podemos prevenir las pérdidas de orina y, de paso, obtener más placer y orgasmos más intensos, trabajando nuestro músculo del amor (la expresión poética que designa al músculo pubococcígeo o PC, el músculo más importante de los músculos del suelo pélvico).
La respuesta está en uno de los elementos de La Maleta Roja más enfocado hacia la salud: las bolas del amor o bolas chinas, que también pueden tener usos lúdicos.
Para mantener los músculos en forma, basta con llevarlas durante una hora 3 días a la semana; siempre mientras se está en movimiento, por ejemplo, haciendo las tareas del hogar, bailando o dando un pequeño paseo.
Las bolas, además de fortalecer la vagina y el músculo pubococcígeo, masajean la vagina y la estimulan al caminar con ellas puestas por lo que, sobre todo si se llevan en público (con la excitación extra que conlleva saber que tenemos un secreto que nadie conoce…), predisponen al sexo.
Plan de entrenamiento
El entrenamiento tiene que ser progresivo. El primer día nos las pondremos 5 minutos, el segundo 10, el tercero 15 y así sucesivamente, hasta que lleguemos a 1 hora con ellas puestas. Después, tres días a la semana es más que suficiente. Introduce las bolas usando siempre un lubricante con base acuosa.
Puedes incrementar la eficacia de tu plan de entrenamiento si, a la vez que usas las bolas, contraes y relajas repetidamente el músculo pubococcígeo. Empieza con pocas repeticiones y ve incrementando progresivamente el número, o bien, haces series completas de los diversos ejercicios de Kegel.
Si no estás segura de cuál es el músculo, detén la micción cuando estés orinando. El músculo que usas para hacerlo es el músculo pubococcígeo.
Recuerda que estás trabajando músculos por lo que el entrenamiento tiene que ser progresivo. Si no, sufrirás agujetas; lo notarás porque te dolerá una zona específica de la parte baja del abdomen. Es desagradable, pero no es preocupante.
Los músculos del suelo pélvico se debilitan por el embarazo y por el parto pero, también, por otras razones como una tendencia hereditaria, la obesidad, la menopausia, aguantarse con frecuencia las ganas de orinar…
La elección de las bolas
Es preferible que sean de un material hipoalergénico, como la silicona, y, sobre todo, que el material que une las dos bolas no sea un cordón téxtil porque puede convertirse fácilmente en un nido de bacterias y gérmenes.
Hay diversas posibilidades:
Las Bolas Pelvic Play 2 de La Maleta Roja; las bolas del amor de Fun Factory, todo un clásico y las Bolas Luna con cambio de peso, que permiten un entrenamiento progresivo con sus bolas de diferentes pesos que se pueden combinar de diversas formas gracias a un ingenioso sistema.
Beneficios del entrenamiento del suelo pélvico
Hablar de los problemas que puede causar un músculo del suelo pélvico débil no es un tema bonito ni agradable, pero no hablar de ello no hace que los problemas desaparezcan…
Para pensar en positivo, preferimos hablarte de los beneficios de entrenar diariamente los músculos del amor. Los resultados se verán al cabo de dos meses.
Elimina o evita la incontinencia debida al embarazo y al parto.
Evita la incontinencia ocasionada por la menopausia.
Ayuda a tener relaciones sexuales más placenteras.
Puede intensificar los orgasmos.
Facilita el parto al producirse menos desgarros y puede evitar una episiotomía
Previene la aparición de hemorroides.
Mantiene los órganos internos en su sitio (útero, vejiga, etc), y evita que se salgan después del parto.
Ejercicios de Kegel
Puedes practicarlos sin las bolas chinas, pero tu plan de entrenamiento amoroso será más efectivo y rápido si combinas las bolas con alguno o varios de estos ejercicios ya que están pensados para ejercitar los diversos músculos del suelo pélvico.
Respira pausadamente mientras realices los ejercicios y no uses los abdominales para hacerlos porque ese no es el objetivo.
Lento
Aprieta el músculo PC y mantenlo así mientras cuentas hasta cinco Relájalo y vuelve a contar hasta cinco. Repite diez veces. Aumenta progresivamente las repeticiones. Cuanto más tiempo aguantes la contracción de los músculos, más fuertes se harán.
Rápido
Aprieta y relaja los músculos tan rápidamente como puedas. Empieza con 10 repeticiones y ve subiendo el número.
Ejercicios avanzados:
El ascensor
La vagina es un tubo muscular con secciones en forma de anillo dispuestas una encima de otra. Imagina que cada una es una planta y ve contrayéndolas de una en una. Antes de subir una nueva planta aguanta durante un segundo. En general, se pueden subir cuatro o cinco plantas.
Para bajar, realiza el recorrido al revés y aguanta un segundo antes de bajar a una nueva planta (es decir, de aflojar). Cuando llegues abajo, relaja la musculatura durante unos segundos.
Es un ejercicio que requiere bastante práctica y concentración. No obstante, a medida que lo vayas practicando irás mejorando.
La onda
Los músculos del suelo pélvico están dispuestos en forma de un ocho, aunque con tres anillos. Un anillo rodea la uretra; otro, la vagina, y el último está alrededor del ano. Contrae éstos músculos de delante a atrás y relájalos de atrás a delante.
Tuppersex, tupper-sex, tapersex, taper-sex, taperses, topersex, tupersex... demasiados nombres...y no siempre bien utilizados!!
¡Exige reuniones La Maleta Roja para vuestra despedida de soltera en Guipuzcoa!
La Maleta Roja te ofrece descubrir que otras despedidas de soltera también son posibles.
Podrás celebrar esta ocasión especial en un ambiente tranquilo y distendido, compartiéndolo con tus amigas y familiares y en el lugar que elijas. Seas la novia o la amiga que quiere organizarle la despedida, seguro que estarás muy ocupada con los preparativos de la boda, ¿no es así? Pues con La Maleta Roja no os tendréis que preocupar por nada:
Podréis disfrutar de una elegante, divertida y sexy reunión de unas dos o tres horas, os reiréis, sonreiréis, descubriréis nuevos productos para mejorar vuestra vida sexual y haréis la noche de bodas de vuestra amiga mucho más picante, sexy y divertida con nuestros productos.
Despedidas Soltera en Donosti - Donostia - San Sebastián, en Irun, en Hondarribi, en Errenteria, en Pasaia, en Hernani, en Tolosa, en Zarautz, en Azpeitia, en Azkoitia, en Eibar, en Bergara, en Zumarraga, en Idiazabal, en Andoain, en Urnieta, en Lasarte, en Oiartzun ... llegamos a todas partes en Gipuzkoa! incluso a Hendaia y otras poblaciones del Pais Vasco francés!!
¿Te interesa?
¿Quieres más información?
Pues envíame un email a
virginia.lamaletaroja@gmail.com
o llámame al 670 257 918
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También puedes contactar conmigo por Facebook:
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¿Cómo funciona una reunión de La Maleta Roja ?
Las reuniones con Sello de Calidad de La Maleta Roja se celebran en casa de una anfitriona -normalmente la amiga que las conoce a todas-, por lo que el acercamiento y la presentación de los productos eróticos tienen lugar en un ambiente acogedor y exclusivo y como alternativa a los sitios habituales existentes, donde no todas las mujeres se encuentran en su elemento.
¿Por qué organizar una reunión?
- es divertido
- puedes disfrutar de la comodidad de tu hogar
- es una excusa ideal para reunir a todas tus amigas
- puedes probar antes de comprar
- te lo entregamos de forma discreta
- es muy informativo: conocerás lo último en productos y ofertas
- te ofrecemos un asesoramiento discreto
- es una ocasión ideal para comenzar o ampliar tu ajuar erótico
¿Cómo?
Podemos ofrecerte estupendas presentaciones si nos avisas lo antes posible para poder coordinar la agenda. Con dos semanas de antelación es ideal, pero no dudes que haremos todo lo posible para atenderte a corto plazo.
Ya verás que reunión más divertida y original puedes ofrecer a tus amigas. Los grupos suelen ser de entre 8 y 12 personas: lo fundamental es que os sintáis a gusto entre vosotras.
Las reuniones duran dos o tres horas y el asesoramiento, aunque de carácter lúdico y divertido, va encaminado a informarte sobre toda una gama de posibilidades para enriquecer la vida erótica de las mujeres y su pareja.
Lo fundamental para La Maleta Roja es que os gusten el asesoramiento y los productos, (que os encantarán...). No hay obligación alguna de compra.
¿Podemos salir de la reunión con nuestras compras?
Trabajamos sobre pedido , aunque algunas asesoras llevamos un stock de productos para entregarlos al momento, en la mayoría de los casos se le envía a la anfitriona (o se le entrega en persona) que es la que suele conocer a todas las invitadas,un paquete discreto con el resto de los productos en aproximadamente 5 días hábiles.
¿Cómo se puede pagar?
En efectivo al final de la reunión.
En Donostia - San Sebastian , en Irun, en Hondarribi, en Errenteria, en Pasaia, en Hernani, en Tolosa, en Zarautz, en Azpeitia, en Azkoitia, en Eibar, en Bergara, en Zumarraga, en Idiazabal, en Andoain, en Urnieta, en Lasarte, en Oiartzun ... llegamos a todas partes en Guipuzcoa! incluso a Hendaia y otras poblaciones del Pais Vasco francés!!
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Nota: En algunas comunidades autónomas puede haber cambios en los puntos anteriormente mencionados.
Ahora que llega el verano, la sangre se altera. Es algo que
todos tenemos bastante claro pero ¿qué sucede el resto del año? Podemos
aumentar el deseo sexual en los otros con el uso de feromonas.
Estudios científicos confirman al sentido del olfato y a las feromonas como factores importantes en la conducta social y sexual.
Vayamos por partes. ¿Qué son las feromonas? El término proviene del griego, formado por los vocablos pherein (tranportar) y hormon (excitar), por lo que literalmente significa “transportadores de la excitación”. Desde un punto de vista científico, las feromonas se consideran como mensajeros químicos que poseen la capacidad de influenciar, a través del olfato, el comportamiento de multitud de seres vivos. En los cultivos ecológicos se utilizan para atraer a determinados insectos.
¿Dónde se encuentran las feromonas en nuestro cuerpo? Las feromonas humanas se encuentran en las glándulas apócrinas axilares y pubianas que se activan después de la pubertad. Las axilares derivan de compuestos andrógenos, y su mayor concentración es observada en los hombres. Tanto unas como otras (axilares y púbicas) son inodoras pero al ser secretadas, y procesadas por la flora bacteriana de la piel adquieren esa esencia particular y única que todos poseemos.
No tienen ningún olor característico, no huelen a nada en concreto. No olvidemos que el olor corporal que desprendemos no es malo y que el sudor solamente huele mal cuando ha pasado un tiempo y ha fermentado. Vivimos en un momento en el cual con los jabones, y su uso excesivo, es más complicado sentir ese olor característico de cada uno de nosotros.
Mecanismos de percepción y procesamiento cerebral de las feromonas
El olor que percibimos nos genera determinados estímulos, sin ser conscientes. Los receptores olfativos envían señales a la corteza cerebral y se conectan directamente al sistema límbico (el que genera respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales) provocando una asociación emocional espontánea y creando memoria.
Siempre se ha pensado que el olfato en los humanos no jugaba un papel decisivo ya que la vista y el leguaje verbal tenían mucho más peso pero diversas investigaciones han reposicionado la importancia del olfato, en especial, en la mujer, en la selección de sus interacciones sexuales. Especialmente las mujeres nos basamos bastante en él a la hora de interaccionar sexualmente.
Investigaciones con feromonas de K. Grammer en roedores dictaminan que los responsables de la percepción y conducción hacia el cerebro (hipotálamo) del mensaje de las feromonas es el órgano vomeronasal, que no forma parte directamente del olfato principal y se encuentra sobre el paladar duro. Esta estructura contiene receptores y neuronas que responden de manera altamente específica solo a determinadas sustancias.
Se considera, de todos modos, que los dos sistemas olfatorios actuarían de manera complementaria, sumándose así las reacciones emocionales espontáneas y la adaptación conductual posterior de acuerdo a la memoria procesada a nivel del sistema nervioso central.
En cuanto al ser humano, si bien posee también un órgano vomeronasal, aún hay alguna controversia sobre la funcionalidad del mismo.
Unos niegan su actividad mientras que otros han hallado evidencias de su rol. Estos últimos, afirman que hay respuesta a las feromonas, incluso en ínfimas cantidades, y avalan cambios específicos en el comportamiento sexual asociado a variaciones en las secreciones hormonales de las mujeres por la estimulación, a través de las feromonas, de estructuras cerebrales implicadas en el mecanismo de la reproducción.
Cambios conductuales debidos a las feromonas
Dos estudios científicos de Cutler W.O (enfocado en la conducta masculina), y Mc Coy (centrado en el comportamiento femenino). Han demostrado de forma contundente la influencia de las feromonas en el comportamiento humano socio-sexual.
En ambos experimentos se agregaron feromonas sintéticas a las lociones o perfumes usados cotidianamente por las personas participantes y se evaluaron, después de seis semanas de uso regular, los efectos en sus interacciones con el sexo opuesto (caricias/afecto/besos, citas formales e informales, dormir acompañados, relaciones sexuales y masturbación)
Al finalizar, el resultado fue similar en ambos géneros. Los que habían usado feromonas había aumentado sus opciones de mantener relaciones sexuales y de dormir acompañados.
Estos resultados fueron aportados de forma subjetiva por las personas que participaron en el estudio y teniendo en cuenta su vida amorosa previa. Por lo que podría decirse que las feromonas sí cumplen un papel importante en la atracción sexual entre los seres humanos.
Fuente: blog Vivelsexo
Estudios científicos confirman al sentido del olfato y a las feromonas como factores importantes en la conducta social y sexual.
Vayamos por partes. ¿Qué son las feromonas? El término proviene del griego, formado por los vocablos pherein (tranportar) y hormon (excitar), por lo que literalmente significa “transportadores de la excitación”. Desde un punto de vista científico, las feromonas se consideran como mensajeros químicos que poseen la capacidad de influenciar, a través del olfato, el comportamiento de multitud de seres vivos. En los cultivos ecológicos se utilizan para atraer a determinados insectos.
¿Dónde se encuentran las feromonas en nuestro cuerpo? Las feromonas humanas se encuentran en las glándulas apócrinas axilares y pubianas que se activan después de la pubertad. Las axilares derivan de compuestos andrógenos, y su mayor concentración es observada en los hombres. Tanto unas como otras (axilares y púbicas) son inodoras pero al ser secretadas, y procesadas por la flora bacteriana de la piel adquieren esa esencia particular y única que todos poseemos.
No tienen ningún olor característico, no huelen a nada en concreto. No olvidemos que el olor corporal que desprendemos no es malo y que el sudor solamente huele mal cuando ha pasado un tiempo y ha fermentado. Vivimos en un momento en el cual con los jabones, y su uso excesivo, es más complicado sentir ese olor característico de cada uno de nosotros.
Mecanismos de percepción y procesamiento cerebral de las feromonas
El olor que percibimos nos genera determinados estímulos, sin ser conscientes. Los receptores olfativos envían señales a la corteza cerebral y se conectan directamente al sistema límbico (el que genera respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales) provocando una asociación emocional espontánea y creando memoria.
Siempre se ha pensado que el olfato en los humanos no jugaba un papel decisivo ya que la vista y el leguaje verbal tenían mucho más peso pero diversas investigaciones han reposicionado la importancia del olfato, en especial, en la mujer, en la selección de sus interacciones sexuales. Especialmente las mujeres nos basamos bastante en él a la hora de interaccionar sexualmente.
Investigaciones con feromonas de K. Grammer en roedores dictaminan que los responsables de la percepción y conducción hacia el cerebro (hipotálamo) del mensaje de las feromonas es el órgano vomeronasal, que no forma parte directamente del olfato principal y se encuentra sobre el paladar duro. Esta estructura contiene receptores y neuronas que responden de manera altamente específica solo a determinadas sustancias.
Se considera, de todos modos, que los dos sistemas olfatorios actuarían de manera complementaria, sumándose así las reacciones emocionales espontáneas y la adaptación conductual posterior de acuerdo a la memoria procesada a nivel del sistema nervioso central.
En cuanto al ser humano, si bien posee también un órgano vomeronasal, aún hay alguna controversia sobre la funcionalidad del mismo.
Unos niegan su actividad mientras que otros han hallado evidencias de su rol. Estos últimos, afirman que hay respuesta a las feromonas, incluso en ínfimas cantidades, y avalan cambios específicos en el comportamiento sexual asociado a variaciones en las secreciones hormonales de las mujeres por la estimulación, a través de las feromonas, de estructuras cerebrales implicadas en el mecanismo de la reproducción.
Cambios conductuales debidos a las feromonas
Dos estudios científicos de Cutler W.O (enfocado en la conducta masculina), y Mc Coy (centrado en el comportamiento femenino). Han demostrado de forma contundente la influencia de las feromonas en el comportamiento humano socio-sexual.
En ambos experimentos se agregaron feromonas sintéticas a las lociones o perfumes usados cotidianamente por las personas participantes y se evaluaron, después de seis semanas de uso regular, los efectos en sus interacciones con el sexo opuesto (caricias/afecto/besos, citas formales e informales, dormir acompañados, relaciones sexuales y masturbación)
Al finalizar, el resultado fue similar en ambos géneros. Los que habían usado feromonas había aumentado sus opciones de mantener relaciones sexuales y de dormir acompañados.
Estos resultados fueron aportados de forma subjetiva por las personas que participaron en el estudio y teniendo en cuenta su vida amorosa previa. Por lo que podría decirse que las feromonas sí cumplen un papel importante en la atracción sexual entre los seres humanos.
Fuente: blog Vivelsexo
El sexo anal forma parte del repertorio sexual de muchas parejas,
heterosexuales u homosexuales. Es una práctica que hasta hace poco era
tabú pero que, como hemos detectado en las reuniones de La Maleta Roja,
cada vez despierta más curiosidad y, también, un poco de morbo (o
mucho).
Las estadísticas indican que alrededor de un 20% de mujeres y hombres heterosexuales practican sexo anal, mientras que en la comunidad gay, el porcentaje se eleva al 50%.
No mencionaremos en este artículo a las personas que consideran el sexo anal un tabú o algo sucio. Este tema es sólo para las personas interesadas en el sexo anal.
Muchos hombres están deseando probarlo y algunas mujeres, también, aunque no saben bien cómo hacerlo o tienen miedo de que sea doloroso o peligroso. Tranquilos, el sexo anal bien hecho y con protección no tiene ningún riesgo para la salud.
Las cuatro primeras cosas que hay que saber antes de pensar siquiera en el sexo anal son:
que el ano es una zona muy sensible, que proporciona mucho placer;
que no debes hacerlo si en realidad no te apetece o no te llama la atención;
que no tiene por qué gustarte. Sobre gustos hay mucho escrito pero nada decidido: todos tenemos nuestros propios gustos sensuales y sexuales;
que hay que tratar la zona con mimo, cuidado y dedicación. ¡Suavidad!
Explorar la zona
Como el mismo deseo, el sexo anal requiere fraguarse poco a poco, al calor de la pasión, pero, también, de las atenciones y de la paciencia.
No es necesario (ni recomendable) empezar con el coito anal, sino que puedes pedirle a tu pareja que explore la zona o dejar que juguetee a su antojo. Hablad primero de vuestros deseos y de cómo llevarlos a cabo. Ante todo, antes de pasar a la acción hay que hacer algunos preparativos sencillos.
Suavidad, relajación, caricias, preparación
Ten a mano siempre un lubricante compatible con preservativos; además de que podéis jugar con él para crear caricias más estimulantes, ayudará a hacer más fáciles los juegos en la zona, que no tiene lubricación natural. Algunas opciones son un lubricante a base de silicona, que tiene tacto aterciopelado y cuyo efecto dura más tiempo, como Analyse Me, un sedoso lubricante específico que suaviza la zona y que hace maravillas ya que ayuda a dilatar, durante el sexo, el ano de forma natural.
Para plantearse cualquier juego anal es necesario que la mujer esté muy excitada y que, además, su pareja estimule manualmente el ano, poco a poco. Esto sirve para dilatar el esfínter anal. La palabra clave para estos juegos iniciales es masajear.
Después de llamar a la entrada con caricias muy acuosas (el lubricante tiene que estar a mano, insistimos), se puede plantear una pequeña visita en el "recibidor", por ejemplo de un dedo.
Todo el proceso tiene que ser lento, progresivo y paciente y el que acaricia tiene que estar atento tanto a las reacciones anímicas de su pareja como a la respuesta de su cuerpo, especialmente en la nueva zona que está estimulando.
Si la persona que recibe estas atenciones no está totalmente tranquila y relajada, el esfínter puede contraerse. También puede contraerse por su cuenta, porque tiene "vida propia".
A todo esto, hay que potenciar las manualidades y usar la otra mano para acariciar el clítoris, que debe ser siempre el gran atendido de todos los desarrollos sexuales.
También cabe la posibilidad de que pruebes tú misma (o tú mismo) antes de involucrar a tu compañero de cama en estos juegos traseros. Así ya no te enfrentarás al miedo a lo desconocido puesto que será algo que ya has experimentado...
Sola o en compañía, relájate. La tensión es la peor enemiga del sexo anal.
Si disfrutas esta breve (y corta en cuanto a su alcance) visita, tu partenaire puede intentar una introducción algo más profunda con su correspondiente movimiento de entrar o salir o un movimiento circular del dedo que resulta muy excitante. Poco a poco el ano aprenderá a aceptar a este "intruso" y a disfrutar de él.
Si las experiencias no son placenteras o, incluso son molestas, es el momento de parar y dejarlo para otra ocasión. O no, todo el mundo tiene derecho a cambiar de opinión.
Algunas personas, con un esfínter muy estrecho, pueden sentir algunas molestias, pero, en ningún caso, debe haber dolor.
Relájate. Relájate más, la clave está en estar tranquilo y a gusto.
No te apresures, no os apresuréis. Si es vuestra primera toma de contacto con los juegos anales, por esta vez está bien, aunque la combinación de estímulos haya llevado al receptor de las atenciones a un orgasmo de locura.
Escoge una buena postura
Para empezar con los juegos anales, una buena postura es que el miembro de la pareja que vaya a recibir este tipo de caricias se tumbe boca arriba y flexione las piernas hacia arriba de forma que deje expuesta sus zonas sensibles. Para este objetivo, puede poner un almohadón debajo de las caderas.
También es una buena postura para iniciarse en el coito anal.
Otra buena posición es que los amantes se tumben de lado, permite caricias en los pechos y en las zonas íntimas si el receptor abre un poco las piernas. También es una buena posición para la penetración.
La postura que más se asocia con el coito anal es la del perrito. Sin embargo, es una postura que permite una penetración profunda y una gran libertad de movimiento del hombre que pueden resultar incómodas o dolorosas.
Si el que se inicia en los juegos anales digitales se siente cómodo, es una posición que permite experimentar a placer.
¿Seguir un poco más?
Quizá en otro encuentro sexual os apetece probar un poco más. Después de seguir el proceso descrito anteriormente (siempre hay que ir poco a poco y con mucha ternura y suavidad), podéis probar a introducir otro dedo, con movimientos suaves. Abrir un poco los dedos –sin forzar- es una caricia placentera si va acompañada de movimientos circulares de los dedos. No debe haber dolor. Todas estas caricias ayudan a ensanchar un poco el esfínter y a acostumbrarlo a las caricias.
Una vez disfrutéis ambos (o tú a solas) de estos primeros juegos anales podéis jugar con un vibrador especial para principiantes, el Vibrating Power Beads
El Mini Tentación puede servir para algunos primeros juegos de toma de contacto, pero muchísimas clientas de La Maleta Roja cuentan que para iniciarse de verdad en el sexo anal un plug como Plug Vito junto con un lubricante a base de agua (los juguetes de silicona no pueden usarse con lubricantes de silicona) con una textura más rica, consistente y sedosa de lo habitual.
En el sexo anal nunca hay bases ya conquistadas ni se pueden saltar los pasos ni acelerar el proceso ni dar nada por supuesto. El placer anal requiere siempre preparación.
Quizá después de varias sesiones de estos juegos tan calientes, deseéis probar la penetración anal. Tranquilidad, suavidad. Relajaos y disfrutad.
La penetración tiene que ser siempre suave para que sea placentera.
Algunos preparativos sencillos.
-Antes de empezar con vuestra tórrida sesión: ve al lavabo. Si prevés sexo anal conviene que el canal esté lo más vacío posible.
-La higiene es fundamental. Lávate antes del encuentro (puedes desaparecer en el lavabo con cualquier excusa o si hay confianza podéis ducharos o bañaros juntos. Además, el baño ayudará a relajaros y a crear ambiente).
-Ten el lubricante en un lugar bien a mano. Usadlo con generosidad.
-Escoge una buena postura.
-Ten preservativos a mano también. El sexo anal es una práctica de mayor riesgo para la transmisión del Sida que el sexo vaginal. También hay riesgo de transmisión de ETS. En la penetración anal es mejor usar siempre preservativo pues en el conducto hay bacterias peligrosas.
-Toda la estimulación y las prácticas anales deben realizarse con cuidado y progresivamente. La brusquedad puede causar lesiones.
-Después del coito anal, cambiad el preservativo si vais a volver a la penetración vaginal. Tened cuidado de no usar los dedos que habéis insertado en el ano para tocar otras zonas.
-Si habéis hecho el coito anal sin preservativo, lavad el pene antes de seguir con cualquier otra práctica sexual sea penetración vaginal o sexo oral.
Fuente: Alicia Mirashi
Las estadísticas indican que alrededor de un 20% de mujeres y hombres heterosexuales practican sexo anal, mientras que en la comunidad gay, el porcentaje se eleva al 50%.
No mencionaremos en este artículo a las personas que consideran el sexo anal un tabú o algo sucio. Este tema es sólo para las personas interesadas en el sexo anal.
Muchos hombres están deseando probarlo y algunas mujeres, también, aunque no saben bien cómo hacerlo o tienen miedo de que sea doloroso o peligroso. Tranquilos, el sexo anal bien hecho y con protección no tiene ningún riesgo para la salud.
Las cuatro primeras cosas que hay que saber antes de pensar siquiera en el sexo anal son:
que el ano es una zona muy sensible, que proporciona mucho placer;
que no debes hacerlo si en realidad no te apetece o no te llama la atención;
que no tiene por qué gustarte. Sobre gustos hay mucho escrito pero nada decidido: todos tenemos nuestros propios gustos sensuales y sexuales;
que hay que tratar la zona con mimo, cuidado y dedicación. ¡Suavidad!
Explorar la zona
Como el mismo deseo, el sexo anal requiere fraguarse poco a poco, al calor de la pasión, pero, también, de las atenciones y de la paciencia.
No es necesario (ni recomendable) empezar con el coito anal, sino que puedes pedirle a tu pareja que explore la zona o dejar que juguetee a su antojo. Hablad primero de vuestros deseos y de cómo llevarlos a cabo. Ante todo, antes de pasar a la acción hay que hacer algunos preparativos sencillos.
Suavidad, relajación, caricias, preparación
Ten a mano siempre un lubricante compatible con preservativos; además de que podéis jugar con él para crear caricias más estimulantes, ayudará a hacer más fáciles los juegos en la zona, que no tiene lubricación natural. Algunas opciones son un lubricante a base de silicona, que tiene tacto aterciopelado y cuyo efecto dura más tiempo, como Analyse Me, un sedoso lubricante específico que suaviza la zona y que hace maravillas ya que ayuda a dilatar, durante el sexo, el ano de forma natural.
Para plantearse cualquier juego anal es necesario que la mujer esté muy excitada y que, además, su pareja estimule manualmente el ano, poco a poco. Esto sirve para dilatar el esfínter anal. La palabra clave para estos juegos iniciales es masajear.
Después de llamar a la entrada con caricias muy acuosas (el lubricante tiene que estar a mano, insistimos), se puede plantear una pequeña visita en el "recibidor", por ejemplo de un dedo.
Todo el proceso tiene que ser lento, progresivo y paciente y el que acaricia tiene que estar atento tanto a las reacciones anímicas de su pareja como a la respuesta de su cuerpo, especialmente en la nueva zona que está estimulando.
Si la persona que recibe estas atenciones no está totalmente tranquila y relajada, el esfínter puede contraerse. También puede contraerse por su cuenta, porque tiene "vida propia".
A todo esto, hay que potenciar las manualidades y usar la otra mano para acariciar el clítoris, que debe ser siempre el gran atendido de todos los desarrollos sexuales.
También cabe la posibilidad de que pruebes tú misma (o tú mismo) antes de involucrar a tu compañero de cama en estos juegos traseros. Así ya no te enfrentarás al miedo a lo desconocido puesto que será algo que ya has experimentado...
Sola o en compañía, relájate. La tensión es la peor enemiga del sexo anal.
Si disfrutas esta breve (y corta en cuanto a su alcance) visita, tu partenaire puede intentar una introducción algo más profunda con su correspondiente movimiento de entrar o salir o un movimiento circular del dedo que resulta muy excitante. Poco a poco el ano aprenderá a aceptar a este "intruso" y a disfrutar de él.
Si las experiencias no son placenteras o, incluso son molestas, es el momento de parar y dejarlo para otra ocasión. O no, todo el mundo tiene derecho a cambiar de opinión.
Algunas personas, con un esfínter muy estrecho, pueden sentir algunas molestias, pero, en ningún caso, debe haber dolor.
Relájate. Relájate más, la clave está en estar tranquilo y a gusto.
No te apresures, no os apresuréis. Si es vuestra primera toma de contacto con los juegos anales, por esta vez está bien, aunque la combinación de estímulos haya llevado al receptor de las atenciones a un orgasmo de locura.
Escoge una buena postura
Para empezar con los juegos anales, una buena postura es que el miembro de la pareja que vaya a recibir este tipo de caricias se tumbe boca arriba y flexione las piernas hacia arriba de forma que deje expuesta sus zonas sensibles. Para este objetivo, puede poner un almohadón debajo de las caderas.
También es una buena postura para iniciarse en el coito anal.
Otra buena posición es que los amantes se tumben de lado, permite caricias en los pechos y en las zonas íntimas si el receptor abre un poco las piernas. También es una buena posición para la penetración.
La postura que más se asocia con el coito anal es la del perrito. Sin embargo, es una postura que permite una penetración profunda y una gran libertad de movimiento del hombre que pueden resultar incómodas o dolorosas.
Si el que se inicia en los juegos anales digitales se siente cómodo, es una posición que permite experimentar a placer.
¿Seguir un poco más?
Quizá en otro encuentro sexual os apetece probar un poco más. Después de seguir el proceso descrito anteriormente (siempre hay que ir poco a poco y con mucha ternura y suavidad), podéis probar a introducir otro dedo, con movimientos suaves. Abrir un poco los dedos –sin forzar- es una caricia placentera si va acompañada de movimientos circulares de los dedos. No debe haber dolor. Todas estas caricias ayudan a ensanchar un poco el esfínter y a acostumbrarlo a las caricias.
Una vez disfrutéis ambos (o tú a solas) de estos primeros juegos anales podéis jugar con un vibrador especial para principiantes, el Vibrating Power Beads
El Mini Tentación puede servir para algunos primeros juegos de toma de contacto, pero muchísimas clientas de La Maleta Roja cuentan que para iniciarse de verdad en el sexo anal un plug como Plug Vito junto con un lubricante a base de agua (los juguetes de silicona no pueden usarse con lubricantes de silicona) con una textura más rica, consistente y sedosa de lo habitual.
En el sexo anal nunca hay bases ya conquistadas ni se pueden saltar los pasos ni acelerar el proceso ni dar nada por supuesto. El placer anal requiere siempre preparación.
Quizá después de varias sesiones de estos juegos tan calientes, deseéis probar la penetración anal. Tranquilidad, suavidad. Relajaos y disfrutad.
La penetración tiene que ser siempre suave para que sea placentera.
Algunos preparativos sencillos.
-Antes de empezar con vuestra tórrida sesión: ve al lavabo. Si prevés sexo anal conviene que el canal esté lo más vacío posible.
-La higiene es fundamental. Lávate antes del encuentro (puedes desaparecer en el lavabo con cualquier excusa o si hay confianza podéis ducharos o bañaros juntos. Además, el baño ayudará a relajaros y a crear ambiente).
-Ten el lubricante en un lugar bien a mano. Usadlo con generosidad.
-Escoge una buena postura.
-Ten preservativos a mano también. El sexo anal es una práctica de mayor riesgo para la transmisión del Sida que el sexo vaginal. También hay riesgo de transmisión de ETS. En la penetración anal es mejor usar siempre preservativo pues en el conducto hay bacterias peligrosas.
-Toda la estimulación y las prácticas anales deben realizarse con cuidado y progresivamente. La brusquedad puede causar lesiones.
-Después del coito anal, cambiad el preservativo si vais a volver a la penetración vaginal. Tened cuidado de no usar los dedos que habéis insertado en el ano para tocar otras zonas.
-Si habéis hecho el coito anal sin preservativo, lavad el pene antes de seguir con cualquier otra práctica sexual sea penetración vaginal o sexo oral.
Fuente: Alicia Mirashi